Toyota y Yamaha prueban V-8 que funciona con hidrógeno
Toyota y Yamaha están desarrollando un V-8 propulsado por hidrógeno para demostrar cómo los motores de combustión interna pueden sobrevivir en un mundo sin combustibles fósiles.
A diferencia del sistema de propulsión de pila de combustible de hidrógeno utilizado en el Toyota Mirai, en el que se utiliza hidrógeno para generar electricidad, este motor prototipo simplemente quema hidrógeno en lugar de gasolina, dejando agua como únicas emisiones.
Basado en el V-8 de 5.0 litros utilizado en el Lexus RC F, el motor de hidrógeno genera 449 hp y 398 lb-ft de torque, según Yamaha. Eso no está muy lejos de los 472 hp y 395 lb-ft de torque de la versión convencional a gasolina.
El proyecto del motor de hidrógeno sigue un acuerdo conjunto de Toyota, Yamaha, Subaru, Mazda y Kawasaki para expandir el uso de tecnologías de combustible alternativo. Los socios planean experimentar con biodiesel y combustibles sintéticos, así como con hidrógeno.
Yamaha también se asoció con Toyota en el desarrollo de un motor de carreras de hidrógeno utilizado en un hatchback Corolla Sport que participó en la serie japonesa Super Taikyu el año pasado. La relación entre las dos empresas se remonta aún más atrás, ya que Yamaha también desarrolló el V-10 de 4.8 litros utilizado en el Lexus LFA.
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Quemar hidrógeno en un motor de combustión no es una idea nueva. A principios de la década de 2000, BMW produjo el Hydrogen 7, un sedán de la Serie 7 con un V-12 propulsado por hidrógeno. Pero la idea parece estar generando más interés últimamente.
El fabricante de automóviles chino GAC anunció a fines de 2021 que estaba probando un motor de combustión de hidrógeno, aunque no confirmó los planes de producción. Además de su auto de carrera Corolla Sport, Toyota también mostró recientemente un concepto GR Yaris propulsado por hidrógeno.
Toyota espera que el hidrógeno pueda ayudar a abordar el impacto climático de los motores de combustión interna y mantenerlos para que disfruten los entusiastas de la conducción, especialmente porque los motores de combustión más antiguos se pueden convertir para funcionar con hidrógeno. Pero el hidrógeno tiene muchos problemas potenciales, incluida la falta de infraestructura de combustible y las emisiones relacionadas con la producción y distribución. Los motores de combustión de hidrógeno también podrían resultar menos eficientes que las pilas de combustible, que a su vez son un uso de energía menos eficiente que las baterías.